Según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), la rosácea afecta a un 5% de la población general total de Europa, cifras que pueden parecer bajas, pero que aumentan cada año de forma progresiva. Aunque se trata de una enfermedad benigna, es una de las patologías dermatológicas que más afecta a la calidad de vida de las personas, provocando inseguridades, estrés o ansiedad. Comúnmente, este rubor suele estar asociado a la ingesta de alcohol, pero es otro de los muchos mitos que giran en torno al problema. Desde Farmacia Viesques te contamos todo sobre la rosácea: causas, síntomas y tratamientos. ¡Echa un vistazo a nuestro último post!
¿Qué es la rosácea y cuáles son los síntomas?
La rosácea es una patología cutánea benigna que afecta principalmente al rostro y más concretamente a la zona central. Esta afección provoca un enrojecimiento en la cara y, en ocasiones, puede confundirse con el acné común. Según la Academia Española de Dermatología y Venereología, afecta tanto a hombres como a mujeres, aunque en el caso de los varones, los problemas se acentúan. Suele iniciarse en torno a los 30-50 años de edad, sin embargo también existen casos en niños.
Para diferenciarlo de otros problemas como el acné común, te contamos cuáles son los síntomas más habituales de la rosácea:
- La característica más llamativa es el enrojecimiento en la zona central del rostro, llamado rubefacción. En los inicios suele ser temporal, pero más tarde llega a ser permanente y viene acompañado de arañas vasculares, pequeños vasos sanguíneos que se rompen en la zona de la nariz y las mejillas.
- Problemas oculares provocados por la hinchazón y las rojeces en los párpados.
- En casos más graves, el enrojecimiento suele desencadenar en lesiones más profundas con granos rojos e incluso con pus. Algunas personas también sufren un engrosamiento en ciertas zonas de la cara, un problema conocido como rinofima.
¿Por qué se produce la rosácea?
El origen de la rosácea sigue generando un gran debate hoy en día. En la actualidad, aún no se conocen las causas exactas de esta patología, pero los expertos si barajan algunas hipótesis como el factor hereditario, la influencia del entorno o un sistema inmunitario hiperactivo. Estos son algunos desencadenantes que provocan los brotes:
- La exposición al frío o al calor (cambios bruscos de temperatura).
- El ejercicio físico intenso.
- Ingerir comidas o bebidas muy calientes.
- El consumo de alcohol.
- La ingesta de ciertos fármacos relacionados con la presión arterial.
- El estrés o la ansiedad.
¿Qué factores incrementan la presencia de rosácea?
Cualquier persona -hombre o mujer-, puede padecer rosácea pero además de los desencadenantes, existen otros factores que aumentan las probabilidades de que aparezca.
- La edad y el género. Ser mujer y mayor de 30 años. Los cambios hormonales que sufren las mujeres pueden influir en su aparición.
- Tener una piel sensible, irritable y con problemas cutáneos adicionales como acné o dermatitis.
- Tener antecedentes familiares.
Tratamientos para la rosácea. ¿Se puede eliminar?
A día de hoy no existe un tratamiento específico que cure de forma tajante la enfermedad, pero los avances en medicina han conseguido ofrecer a los pacientes medicamentos y también ciertos tratamientos que alivian los síntomas y ayudan a reducir los brotes.
- El primer consejo cuando se inicia el tratamiento, es evitar los desencadenantes y cuidar la piel con productos de cosmética muy específicos, incluyendo el uso de cremas fotoprotectoras.
- Fármacos. Gracias a la investigación, en los últimos años se han desarrollado diferentes medicamentos para tratar la rosácea. Los más utilizados son: los antibióticos orales enfocados a reducir la inflamación en rosáceas graves con protuberancias o dolorosos granos. Por otra parte, los medicamentos tópicos en formato crema o gel para reducir el enrojecimiento. El efecto de estos productos suele ser temporal por ello su uso es cotidiano. Además, existen complementos alimenticios para el tratamiento de la rosácea en formato comprimidos como Rosacure Combi, para tratar las rojeces del cutis desde el interior.
- Tratamientos con láser y luz pulsada. Estos tratamientos son muy comunes en la actualidad y están demostrando sus múltiples beneficios para atajar la rosácea vascular.
Algunos consejos extra para cuidar la piel con rosácea
La piel con rosácea requiere, además de los tratamientos, un cuidado muy específico:
- Tratar la piel con delicadeza. No frotar la piel, ni utilizar productos agresivos. Evitar las colonias o sprays cerca de la cara que puedan ser irritantes.
- Limpiar e hidratar la piel al menos dos veces al día para eliminar la contaminación o el exceso de grasa. No aplicar nunca ni agua demasiado caliente o fría.
- Evitar el uso de maquillajes y si es necesario, elegir productos específicos para pieles sensibles. Priorizar en estos casos, maquillajes emolientes de tonos verdosos.
- Cuidar la alimentación con una dieta rica en vitamina C y D. Evitando hábitos perjudiciales como el tabaco o el alcohol.
- Mantener una rutina sosegada y evitar el estrés, es uno de los peores desencadenantes.