El invierno es la estación del año donde nuestro sistema inmunológico se vuelve más vulnerable. Además, factores como las bajas temperaturas, menor exposición al sol y el aumento de resfriados y gripes pueden poner a prueba nuestras defensas.

¿Por qué es tan importante el sistema inmunológico?

El sistema inmune es la defensa natural del organismo contra infecciones y enfermedades y está formado por células, tejidos y órganos que trabajan en conjunto para detectar y eliminar patógenos, como virus, bacterias y otros microorganismos. Por ese motivo, un sistema inmunológico fuerte puede ayudarnos a evitar que enfermedades comunes, como los resfriados y la gripe, nos afecten.

Tips para conseguir unas defensas fuertes

¿Cómo mantener nuestro sistema inmune en forma durante los meses más fríos del año? Para ello, es necesario implementar unos hábitos saludables, como una alimentación sana, así como es esencial aprender a manejar el estrés, mantener una rutina de sueño adecuada y llevar un estilo de vida saludable:

  • Gestionar el estrés. El estrés crónico puede afectar negativamente a la respuesta inmune, puesto que debilita la capacidad del cuerpo para combatir infecciones. A través de técnicas de relajación, como la meditación o el yoga, o simplemente disfrutar de actividades placenteras, pueden ayudar a reducir la ansiedad.
  • Evitar la falta de sueño. El sueño juega un papel fundamental en el funcionamiento del sistema inmunológico. Durante el descanso, el cuerpo realiza procesos de reparación y regeneración que son esenciales para mantener nuestras defensas fuertes y preparadas para combatir infecciones. Sin embargo, no solo es importante dormir la cantidad adecuada de horas, sino también la calidad del sueño que obtenemos. Para conseguirlo, es vital controlar el consumo de bebidas con cafeína, limitar el uso de pantallas antes de dormir y hacer ejercicio regularmente.
  • Alimentación equilibrada. Una dieta sana es fundamental para mantener las defensas fuertes. Algunos nutrientes esenciales para el sistema inmunológico son la vitamina C, el zinc, la vitamina D y los antioxidantes, presentes en alimentos como frutas cítricas, verduras de hojas verdes, frutos secos y semillas. Además, es importante incorporar proteínas magras, como el pollo y el pescado, y alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, como el salmón, que ayudan a reducir la inflamación y fortalecer las defensas.

Suplementos y medicamentos para combatir los virus

Además de una dieta saludable, los suplementos pueden ser de gran ayuda para fortalecer el sistema inmunológico y prevenir algunas enfermedades típicas del invierno. Entre ellos, destacan:

  • Brudy Pio. Estas cápsulas, con activos que favorecen el bienestar del sistema inmunológico, ayudan a fortalecer las defensas naturales del cuerpo y son ideales para mantenerse saludable durante el invierno.
  • Magnesio de Sandoz. Se trata de un suplemento, en formato sobre, que contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunológico y al bienestar general, además de reducir la fatiga y favorecer una correcta respuesta inmune.
  • Frenadol Descongestivo. Este medicamento, indicado para combatir los síntomas del resfriado, como la congestión nasal, y aliviar la incomodidad de los procesos gripales, también ayuda a reducir la inflamación y mejorar la respiración.
  • LKN Life Regenerative. Con una fórmula de vitamina C, proteínas y magnesio, este complemento alimenticio apoya el sistema inmunológico y ayuda al cuerpo a la formación y buen funcionamiento de los cartílagos, huesos, masa muscular y músculos, mejorando la elasticidad de los tejidos.

Fortalecer el sistema inmunológico durante el invierno es clave para mantenerse saludable y prevenir enfermedades, además de llevar una dieta rica en nutrientes, así como es fundamental cuidar el bienestar emocional y físico y apoyarse en los suplementos adecuados cuando se necesite.

Productos relacionados