Con la llegada del otoño y los cambios de temperatura, comienza la temporada de resfriados. Por lo general, esta infección no resulta grave, pero sí bastante molesta, sobre todo para los más pequeños de la casa por la sensación general de malestar e irritación que les produce en su cuerpo. Por ello, para combatir el resfriado y que la recuperación sea lo más rápida posible, es importante tener en cuenta estas consideraciones.
¿Qué es el resfriado común?
El resfriado común es una enfermedad viral leve contagiosa que tarde o temprano afecta a todos los niños en un momento u otro de sus vidas, y que afecta principalmente al tracto respiratorio superior. Los síntomas más comunes son:
- Congestión nasal
- Estornudos
- Tos
- Dolor de garganta
- Y, fiebre leve
¿Cuánto dura el resfriado en los niños?
La duración del resfriado común en los niños puede variar, pero generalmente suelen durar entre 7 y 10 días. Sin embargo, los síntomas más intensos suelen aparecer durante los primeros 2 o 3 días y luego disminuyen gradualmente. Los pequeños pueden seguir teniendo síntomas leves durante varios días después de que los síntomas más graves hayan remitido.
¿Cómo prevenir el contagio?
Para prevenir el contagio del virus y evitar el resfriado, estas son algunas precauciones para tener en cuenta:
- Higiene: es muy importante que los menores cojan la rutina de lavarse las manos al llegar a casa y antes de sentarse a comer. Las manos son el principal medio por el que muchas bacterias llegan al organismo, ya que el virus puede sobrevivir después de varios días en superficies como, por ejemplo, pomos de puertas o juguetes.
- Ventilación: ventilar al menos 3 veces al día para evitar la acumulación de microbios en las estancias.
- Usar pañuelos desechables y taparse la boca al estornudar para evitar los contagios. Cuando una persona infectada estornuda o tose, las partículas que expulsa contienen el virus, y al entrar en contacto con una persona sana pueden contagiarse fácilmente.
¿Cuándo es necesario acudir al médico?
Si bien el virus del resfriado, suele ser una enfermedad leve, es importante consultar con el médico si aparecen ciertos signos de alarma, como son:
- Fiebre alta o persistente
- Dificultad respiratoria
- Síntomas graves o persistentes
- Niños o adultos con enfermedades respiratorias crónicas
Tratamientos y medicamentos para el catarro en niños
Desafortunadamente los medicamentos no pueden curar ni acortar el resfriado, pero pueden aliviar algunos de sus síntomas y hacer que los menores se encuentren mejor. El uso y empleo de medicamentos para la garganta, la congestión y la fiebre suelen ser la solución más efectiva.
¿Dalsy o Apiretal? Cuándo se debe tomar cada uno
Para reducir la fiebre y aliviar el dolor, se pueden utilizar antitérmicos como son el Dalsy o Apiretal. Si hay dolor de garganta, es preferible usar el ibuprofeno (Dalsy), pues les ayudará a desinflamar y, si solo hay fiebre, se debe optar por el paracetamol (Apiretal).
¿Cómo eliminar los mocos con congestión nasal?
Para aliviar la congestión nasal, existentes productos básicos como es el uso de sprays de agua de mar de Sterimar, que sirven para prevenir la irritación de las fosas nasales y aliviar las molestias causadas por la congestión nasal.
¿Cómo aliviar el dolor de garganta?
Por último, para la irritación de garganta, se recomienda el uso de caramelos como Strepsils. Son ideales para el para el alivio local sintomático de las infecciones leves de boca y garganta que cursan sin fiebre.
Otros métodos para aliviar los síntomas en niños:
Además, existen otros métodos para ayudar al pequeño a lidiar con el resfriado:
- Hidratación: mantener al pequeño bien hidratado es fundamental. Los líquidos como el agua, el jugo y el caldo ayudan a aflojar la mucosidad y a aliviar la irritación de la garganta.
- Vaporización y humidificador: utilizar un humidificador en la habitación del niño puede ayudar a mantener el aire húmedo, disminuir la congestión nasal, además de ayudarles a dormir mejor por las noches.
- Gárgaras con agua salada: una de las formas más efectivas para aliviar la inflamación y reducir la irritación y el dolor de garganta consiste en que los niños realicen gárgaras con agua tibia y sal varias veces al día.
- Descanso: el reposo es esencial para que el cuerpo del menor combata la infección. Es importante asegurarse de que duerma lo suficiente para que su sistema inmunológico pueda trabajar de manera efectiva y ayudar a combatir el catarro.
Afortunadamente la mayoría de los resfriados desaparecen solos y, la mayoría de las veces no representan un riesgo para la salud del niño. Con los cuidados necesarios y una buena dosis de amor, enseguida se recuperarán.
